Colegio Itálica (Sevilla) 2021

Cuando Hitler robó el conejo rosa

Autora: Alejandra Domínguez López
Curso: Primero de la ESO
Centro: Colegio Itálica (Sevilla)

Para ser sincera, elegí este libro para realizar el trabajo como podía haber elegido otro cualquiera.

Cuando comencé a leerlo, pensé que sería un libro más, pero, al contrario que otras veces, no llevaba mucho leído cuando me di cuenta de que me estaba gustando. Siempre que un libro me gusta mucho me imagino a sus personajes y les pongo cara a cada uno de ellos. En este caso, me imaginé a su protagonista, una niña llamada Anna, con el pelo corto, castaño, de estatura mediana y con mucha imaginación, que vivía con sus padres y su hermano en una casa grande de dos plantas con jardín.

Me hizo gracia que la imaginación de Anna la empleara en escribir poemas sobre terremotos, huracanes y otros desastres naturales. Esto era de lo único que hablaba estando en Alemania, quizás porque la situación que se vivía en el país, con los nazis hablando mal de los judíos y destruyendo sus tiendas, casas, etc. no la hacía ser muy optimista, aunque hacía todo lo posible por estar alegre.

Anna y su familia vivían en Alemania cuando Hitler llegó al poder. Eran judíos, por lo que tuvieron que irse de su país y ahí empezó todo.

Como conocía la historia de Ana Frank, miré si el libro trataba de una historia real. Investigué sobre la autora y supe que Judith Kerr nació en Berlín en 1925 en una familia judía y que, en 1933, como les daba miedo lo que les pudiera pasar con Hitler en el poder, emigraron a Suiza, después a Francia y por último a Londres, donde vivió y se convirtió en una escritora famosa de cuentos infantiles hasta su muerte en 2019.

Por eso, supe que el libro contaba su propia historia y eso hizo que me gustase todavía más.

Aunque he dicho que conocía la historia de Ana Frank, este libro es distinto porque ni ella ni su familia tienen que esconderse de los nazis, pero sí tienen que dejar su país por miedo. Anna, siendo niña tiene que dejar a sus amigos, su barrio, su casa y toda su vida para buscar un futuro sin miedo a lo que le pudiera pasar por ser judía.

La parte que más me ha gustado del libro es aquella en la que se van a Francia y estudia en un colegio francés y conoce a muchas niñas de las que se hace amiga. Consigue un título de francés que solo podían conseguir las niñas de nacionalidad francesa y ella, que se va a Inglaterra y donde su padre se convierte en guionista de cine, lo que la hizo ponerse muy contenta y escribió por primera vez un poema alegre.

El libro me ha provocado, por un lado, tristeza porque me dio pena de que tuviera que abandonar su país y sus amigos por miedo, pero también alegría porque en los países donde vivía se lo pasaba bien con todos los niños que conocía.

Al final he entendido que el título del libro, cuando dice que Hitler robó el conejo rosa, lo que quería decir era que Hitler había robado la infancia de Anna y la de otros muchos niños.

Tanto me ha gustado que al final me ha dado pena haber terminado de leerlo.

Harry Potter y la Cámara Secreta

Autor: Eusebio Ubaldo Domínguez Rodríguez.
Curso: 1º ESO.
Centro: Colegio Itálica (Sevilla)

Mi libro preferido es “Harry Potter y la cámara secreta”. Me encantó desde que vi la portada. En realidad, me gustan todos los libros que he leído de J. K. Rowling, creo que es muy buena escritora. Muchos niños que conozco han leído Harry Potter. Cada libro va avanzando contigo, pueden leerlo niños desde 8 hasta 15 años.

Nos va contando la vida de Harry, de cómo pasa de ser una persona normal, a convertirse en uno de los mejores magos de la historia y cómo va derrotando a todos sus enemigos mientras iba descubriendo su pasado y va haciendo nuevos amigos.

Me los he leído más de una vez porque me encantan, me da pena que no escriban más libros de la saga; aunque, de todos modos, me alegra que otras personas disfruten como yo he disfrutado de ellos. Algunas veces, alguien me ha pedido que le recomiende algún libro y siempre le he dicho que para mí el mejor es Harry Potter.

Yo empecé́ a leerlo en Cuarto de Primaria, porque tenía que hacer una ficha de lectura y no me había leído ningún libro aún. En una cena, mi madre me dijo que creía que me podía gustar Harry Potter, y esa misma noche me lo descargué en su libro electrónico y me enganché. En ese curso, me leí́ todos los libros de la colección. Recuerdo que algunos días en verano mi abuela me “reñía” por quedarme hasta muy tarde leyendo…, no solo me leí́ la saga principal sino también todos los libros secundarios que sacó J. K. Rowling, desde entonces he leído bastante más.

Me encantaba quedarme hasta muy tarde leyendo y pensando en cómo podía ser el mundo con la magia o decidiendo qué criatura fantástica me gustaba más. Creo que para escribir Harry Potter hay que tener muchísima imaginación y creatividad, aparte del esfuerzo y el trabajo de pensar todo al mínimo detalle para que al final cuadre. Me parece asombrosa la capacidad de J. K. Rowling para crear esta historia.

Es un libro que cambia tu manera de pensar, crees que puede haber un mundo totalmente distinto y tú te lo estás perdiendo. Hace que tu imaginación se desarrollé dándote millones de posibilidades. Hubo una época en que soñaba con ser un mago y hacer millones de cosas con la magia, desde comprarme un sobre de cartas, hasta acabar con la pobreza. Me producía mucha alegría pensar en todo lo mágico, e incluso aprendí́ trucos de magia solo para producir en otros esa alegría que me daba a mí el libro. Gracias al libro también he descubierto muchas cosas que no sabía: desde estaciones de trenes de Londres, a criaturas mitológicas que no conocía, hasta pueblos de Irlanda.

He elegido este libro para que más personas conozcan a Harry Potter y puedan sentir con él, lo que he sentido yo. Porque, cuando estás triste, enfadado…, leer siempre es una solución, ya que te transporta a otro lugar, a otra realidad. Si estás nervioso, te relajas leyendo. A mí, leer me ayuda mucho, no solo para aprender nuevas palabras o saber escribirlas bien, sino que, principalmente, me ayuda a tranquilizarme y a sentirme mejor.

Para mí, la saga de Harry Potter representa el valor de la amistad y que el amor siempre es más fuerte que el odio.

El libro del destino

Nombre: María García Gallegos
Curso: 1º ESO
Centro: Colegio Itálica (Sevilla)

Siempre me ha gustado leer. Es algo que me ha gustado mucho desde el primer día que aprendí́. Siempre recibía con agrado todos los libros que me daban, largos, cortos, viejos, nuevos, de misterio, biografías, para niños, para adultos, ¡de todo! Y eso también incluía una vez que vino mi tía a casa, trayendo consigo todos los libros de cuando era ella niña. A mí ninguno me llamó en especial la atención, ¡todos me gustaban!

Días más tarde, me dediqué a observar con atención los libros que trajo mi tía. Había algunos tan viejos que apenas se leía el título. Otros, que no tenían. Pero había uno que llamó mi atención un poco más que los demás. Era el Libro del Destino.

Fue abrir el libro y mi vida cambió para siempre. La historia iba sobre un instituto, Ever After High, al que acudían todos los personajes de los cuentos. Los protagonistas eran Apple White, hija de Blancanieves, y Raven Queen, hija de la Madrastra de Blancanieves, aunque Raven no era mala. De pequeña estuvo muchísimo tiempo con su madre, y la escuchaba mientras ella (la madre) urdía planes para conquistar, matar y asesinar. Tanto fue así́, que se extralimitó. No solo cumplió con su deber como Madrastra de Blancanieves, sino que arrasó a la Bella Durmiente, destrozó el País de las Maravillas e intentó conquistar todos los reinos del País de Siempre Jamás.

Pero el Día del Destino se acercaba. Aquel era el día en el que firmaría el Gran Libro de los Cuentos y se comprometería a seguir los pasos de su madre. En aquel momento, me sentí́ completamente identificada con Raven, una niña con un futuro incierto, tratando de huir de su destino, en el que se volvería malvada, algo que no era. Un futuro complejo, lleno de preguntas, aunque en realidad no tenía mucho sentido, pues su destino era ser la Madrastra de Blancanieves. No podía elegir, aquello estaba terminantemente prohibido en el País de Siempre Jamás. Pero su instinto le decía que había alternativa, que podría romper las leyes para crear su propio futuro, construir su vida a su manera.

Pero claro, si no firmaba, haría puf. Desaparecería. O al menos eso afirmaba el director, Milton Grimm.

Pero no todos estaban dispuestos a creerle. Con la ayuda de Maddie, la mejor amiga de Raven, descubrió́ que, en las catatumbas, habitaba el hermano menor de Milton Grimm, Giles Grimm. Este afirmaba que todos podían elegir su propio destino, pues

no desaparecerían. Nadie, ni siquiera Milton Grimm, podía escoger el destino de los demás.

Así́ fue como Raven y yo aprendimos a que nuestro futuro es nuestro, de nadie más, y solo nosotros podemos cambiarlo. Que NADIE tiene permiso para cambiar nuestro futuro, solo NOSOTROS podemos elegir.

Si algún día llega a leer esto, quisiera darle las gracias a Shannon Hale por crear tan maravillosa historia. Este libro me enseñó́ mucho, a que mi vida es mía, empezó́ sin remedio, pero el cómo acabará, va a depender solo y únicamente de mí.

El Tatuador de Auschwitz

Autora: Marta Sabador López
Curso: 2º ESO
Centro: Colegio Itálica (Sevilla)

Un día, mientras estaba con unas amigas tomando algo, muertas del aburrimiento, decidimos echar un vistazo a una librería que había cerca. En ella, como en todas las demás, había libros de todo tipo, muy poco interesantes desde de mi punto de vista, ya que, sinceramente, no me gustaba mucho leer, porque los libros que, generalmente, leían mis compañeros a mí me parecían aburridísimos, eternos, sin principio ni fin.

De repente, sin darme apenas cuenta, se me fue la mirada a una estantería donde figuraba un pequeño cartel con el título “Historia de la Humanidad”. Me quedé mirándolo fijamente porque me gusta conocer todo lo que ha pasado antes y después de que yo naciera. Por ello, me puse a observar los libros que en ella estaban y me centré en uno titulado “El Tatuador de Auschwitz”. Me llamó la atención la historia que narraba, una historia de amor entre dos personas, Lale y Gita, en un momento tan cruel de la historia de la humanidad como el de la Segunda Guerra Mundial.

Ambos fueron deportados a Auschwitz-Bikernau, donde se conocieron. Lale, para sobrevivir, se convirtió́ en el Tätowierer (tatuador) y fue él mismo quien tatuó́ a Gita, de la que se enamoró́ nada más verla.

Tras tres años de sufrimiento y dolor en el campo de concentración, en los que Gita enfermó gravemente de tifus (salvándose gracias al esfuerzo de Lale por conseguirle la medicación) y en los que Lale fue duramente castigado por esconder joyas y dinero en su colchón que conseguía del bloque llamado Canadá́ (bloque en el que a todos los prisioneros despojaban de sus propiedades) y que utilizaba para conseguir alimentos para ellos dos y para los demás prisioneros, siendo, por ello, llevado al bloque 11 donde los nazis tenían una auténtica cámara del horror y del que difícilmente se conseguía salir con vida.

Justo antes de ser liberado el campo por los rusos, durante el traslado por las SS de las mujeres internas a otro campo de concentración, Gita junto con otras cuatro mujeres consiguen escapar, dejando allí́ a Lale, quien es llevado a Mauthausen de donde, después de un tiempo, logra huir, siendo interceptado por las tropas rusas, quienes lo obligan a trabajar para ellos, pues dominaba varios idiomas. Una vez que consiguió́ ganarse la confianza de los rusos, pudo escapar y llegar hasta su ciudad natal, Krompachy (Eslovaquia), donde se reencontró́ con su hermana en su antigua casa.

Una vez a salvo y animado por su hermana, Lale decide buscar a su amada, encontrándola en Bratislava, donde después de dos semanas en la estación de ferrocarril atento a cada tren que llegaba y preguntando a cada persona que veía, consigue localizarla, continuando así́ con su historia de amor.

Esta desgarradora lectura consiguió́ conmoverme tanto que decidí́ visitar aquel terrible lugar, siendo indescriptibles las emociones que sentí́ allí́, donde, a pesar de haber tanto sufrimiento y tanta desesperación, también hubo sitio para una bonita historia de amor.

La Reina de Nada

Autora: Martina Torres Márquez
Curso: 1ª ESO
Centro: Colegio Itálica (Sevilla)

El medio de transporte se inventó́ mucho antes de que nosotros lo supiésemos. Siempre pensé́ que los libros son un medio de transporte, que te pueden llevar volando más alto que un avión, más rápido que un coche de fórmula uno, o a más tierras sin descubrir que un barco velero y siempre es el viaje más bonito. Ese viaje te enamora. En él, vives múltiples aventuras y sientes desde emociones positivas a negativas. Lo que te pueda ocurrir depende de cuan compenetrados estén tu cabeza, tu corazón y tu libro. Esto mismo me ha pasado a mí.

Desde pequeña he tenido muchas aficiones, entre ellas viajar, pero ninguna me había gustado tanto como leer. Leer me llevaba a una gran cantidad de sitios y si tenía algún problema me refugiaba en las páginas. Siempre he encontrado en ellas la disipación, la claridad y calma para mis angustias

“La reina de nada” es el tercer libro de una trilogía que descubrí́ por casualidad. Su protagonista Jude Duarte, vivió́ una tragedia cuando era niña y fue secuestrada por un hada junto con su hermana mayor y su hermana gemela. Jude es humana y debe encontrar su sitio en Faerieland, el país de las hadas. Estas son unas hadas diferentes, no se parecen en nada a las de los cuentos. Son crueles, discriminan y maltratan a los seres humanos porque se creen que son superiores a ellos. Al enterarme de eso, me sentí́ como Jude, pues yo también tenía que encontrar mi sitio. Siempre fui diferente a los niños de mi clase y me cuesta adaptarme a lo que ahora hacen o a lo que se dedican. Pero Jude me ha demostrado que todo es posible. Desde la existencia de las hadas a encontrar el amor donde menos lo esperabas. Suspiro a suspiro he encontrado la felicidad en un mundo nuevo. Siempre quise vivir allí́, pero he descubierto que no es necesario, que las personas que te quieren son como ese mundo (mágicas).

Con este libro he sentido cada palabra, cada roce, cada sentimiento. He sido Jude. He estado enamorada mientras lo estaba ella, deprimida si ella también lo pasaba mal y me he sentido triunfante. Jude se convierte en la reina de las hadas, estrategia a estrategia y trabajando duro. Me ha enseñado a ponerme las metas más altas, a ser yo misma y a no tener miedo de quien soy o lo que puedo llegar a ser. A partir de ahora conseguiré́ todo lo que me proponga. Voy a seguir su ejemplo y a ser valiente. A demostrar que yo también valgo y que, si no valgo para todos, sí para mi familia, mis amigos y, si llega, para esa persona especial, siempre estarán ahí́ para apoyarme. Recomiendo este libro a todo el mundo si de verdad quieren cumplir sus sueños, porque Jude es para mí un ejemplo a seguir y espero que pueda serlo para más personas como yo. No somos diferentes, ni tampoco somos raros, somos especiales. Gracias Holly Black por crear a Jude. Gracias Jude por ser tu misma y ensenarme a serlo yo también.

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