La ladrona de libros

 

Autor: Álvaro Piña Fuentes
Curso: 2º ESO C
IES San Fulgencio. Écija (Sevilla)

 

Este agosto pasado, estando sentado en el sofá viendo la televisión, vi asomar este maravilloso libro por la pequeña biblioteca de mi madre. Me acerqué y leí un poco el principio. Cuando apenas llevaba cinco páginas, no lo podía dejar. Aquel día, leí, al menos, cincuenta páginas.

Cuando terminé el libro (el uno de enero de este año) salió la película y fui a verla.  Al acabar, como me había leído el libro, comprobé que en la película se habían omitido muchos detalles.

A continuación, haré un resumen del libro para animaros a su lectura. Dice así:

Esta novela cuenta la historia de una niña que es acogida por una familia alemana. En el trayecto muere su hermano pequeño. Cuando llega a la ciudad donde le esperan sus padres de acogida, descubrirá el cariño de Hans Huberman, que le adentrará en el mundo de la lectura y la caligrafía. También conoce a Rudy Steiner, que se convierte en su mejor amigo; a Max Vanderburg, un judío que se esconde en casa de los Huberman con el que entabla una buena amistad, y a Ilsa Hermann, la esposa del alcalde, que le permite que lea sus libros e incluso que los robe.

La historia se narra en la Alemania nazi anterior a la Segunda Guerra mundial.

Al pasar mucho tiempo en el sótano con Max, los libros salvaron su vida al ser bombardeado Himmelstrasse. En ese momento ella estaba en el sótano escribiendo, y los demás durmiendo plácidamente cuando llegó el desastre. El narrador de la historia  es la propia muerte.

Recomiendo su lectura, no os arrepentiréis.

 

 

El diario de Ana Frank

 

Autora: Alba Martín Fernández
Curso: 2º ESO-C
IES San Fulgencio. Écija (Sevilla)

 

Es uno de los libros que más me ha llegado, por decirlo de alguna manera. Me lo dejó una buena amiga este verano. Me dijo que también era su libro favorito y lo leyera. Al principio, solo lo leía por no desilusionarla pero, según avanzaba, más me gustaba. Me acompañó en las calurosas tardes de verano, cuando iba de viaje. Desde que me leí aquel libro, veo las cosas de otra manera. Me emociono cada vez que recuerdo a Ana (la protagonista), sus palabras, su historia, que a pesar de toda la calamidad que estaba pasando, ella seguía esforzándose cada día por salir y llegar a ser una gran mujer algún día.

El libro trata de la época de los nazis. Es el diario de una niña de trece años que sufre aquella horrorosa época, pero a ella no le importa porque sigue con su familia, aunque, como toda adolescente, se pelea de vez en cuando con sus padres, y en el libro explica sus sentimientos.

También, en la casa de refugiados donde estaban escondidos Ana y su familia, estaba otra familia judía, amiga de la familia de Ana. En la familia de Ana eran cuatro: Ana, sus padres y su hermana mayor, y en la familia que vivía con ellos eran tres: los padres y un muchacho, Peter. Ana convivía con ellos cada día. Entre Ana y el muchacho pasan muchas historias. Las partes que más me gustaban eran en las que Ana hablaba de aquel niño, por el cual sentía algo pero ella no sabía el qué.

Viven muchas cosas en aquella casa durante dos largos años, y está todo escrito en ese libro: cómo se sentía Ana cada día, qué hacían, qué comían, los sustos que se llevaban al creer que iban a ser descubiertos.

Resumiendo, creo que a todo el que lo lea le va a transmitir algo: a algunos, tristeza; a otros, esperanza e incluso alegría. Es un libro precioso y vale la pena leerlo. Como siempre digo, es mejor leer un buen libro que ver una buena película.

 

 

El niño con el pijama de rayas

 

Autora: Dunia Mª Carmona Saldaña
Curso 1ª ESO-B
IES San Fulgencio. Écija (Sevilla)

 

Este libro es muy bonito y, a la vez, un poco triste. Yo, solo al ver el título, me interesé en leerlo. Espero que os guste el resumen y mi opinión os influya para que os leáis el libro.

Érase una vez una familia que vivía en un pueblo. El padre era un comandante del ejército, tenía una mujer, una niña y un niño (Bruno). Ellos se iban a mudar a un pueblo por el trabajo del padre e hicieron una fiesta para despedirse de sus amigos. Cuando terminaron, al día siguiente, se montaron en el coche.

Cuando llegaron al pueblo, los niños eligieron sus cuartos. El cuarto de Bruno tenía una ventana que daba a una granja, o eso creía él. Cuando fueron al comedor para almorzar, Bruno comentó lo de la granja y, por la tarde, los padres taparon la ventana. A Bruno le gustaba explorar, y exploró la casa, pero por la parte de delante. Una vez quiso explorar la parte de detrás, pero la sirvienta no lo dejó. Él volvió para la cena y le dijo a sus padres que se aburría mucho, y el padre le dijo que iría un profesor a la casa para darle clases a él y a su hermana. El soldado le dijo a un hombre, que era el que pelaba patatas, que buscara una rueda para el niño. Él, acompañado por el niño, fue al garaje a buscarla y, cuando llegaron, el niño vio una ventana que daba a la granja. Cogió la rueda y le formaron un columpio. Después de almorzar, se fue a la ventana, y corriendo llegó a lo que él creía que era una granja, y vio a un niño solo, sin pelo y con el pijama de rayas. Esto le extrañó mucho porque el hombre que pelaba patatas en su casa también llevaba el mismo pijama de rayas. Después de charlar, se fue a su casa y le dijo que iría al día siguiente a visitarlo.

Al día siguiente, lo hizo. Después de charlar un rato, el niño del pijama de rayas le dijo que tenía hambre y el niño le dijo que, al día siguiente, le llevaría comida. Al día siguiente, después de merendar, cogió comida y fue y se la dio al niño del pijama de rayas. Y él le dio las gracias y se lo comió rápidamente porque tenía mucha hambre. Él le preguntó que por qué no salía para jugar y él contestó que no podía porque había una reja. Después de charlar un rato, tocó una sirena, y el niño del pijama de rayas cogió una carreta y se fue corriendo.

Al día siguiente, llegó el profesor a su casa y les dio clases. Cuando estaban cenando, el padre dijo que los judíos eran malos. Después de cenar, se fueron a dormir. Cuando amaneció, desayunaron y el niño cogió comida para el niño del pijama de rayas y se fue corriendo. Esperó un rato y llego el niño del pijama de rayas y se comió la comida. Bruno le preguntó a Scout que por qué estaba encerrado ahí  y él dijo porque era judío. Bruno, pensando en lo que dijo el padre, le dijo que ya volvería y se fue corriendo. Había una fábrica que casi nadie sabía para qué era. Bruno había comentado que olía muy mal y el soldado lo comentó delante de la esposa del comandante y dijo lo que casi nadie sabía. Ella, preocupada, enojada, fue a hablar con su marido. Cuando llegó, le preguntó por qué no le había dicho nada; él puso de escusa porque lo juró por su vida que jamás lo diría. Ella, desde ese día, estaba decepcionada de su marido, por lo que hacían con la fábrica. Llegó la hora de la cena, y el hombre mayor del pijama de rayas estaba sirviendo vino, y las sirvientas estaban sirviendo la comida. El soldado comentó una cosa del padre que estaba prohibido y el comandante pidió vino. El hombre mayor lo sirvió, pero cuando se los sirvió al soldado, le derramó la copa y el soldado lo cogió de la camiseta y se lo llevó al pasillo, y le pegó.

Al día siguiente, por la mañana, Bruno fue a la cocina y se encontró a Scout limpiando las copas, y le dijo que si quería un dulce, y Scout dijo que sí, después apareció el soldado y dijo que lo había robado, Bruno asustado dijo que era verdad. Pasó la tarde, la noche y al día siguiente Bruno fue a ver a Scout, pero él no estaba, al día siguiente fue, pero de nuevo nada. Al siguiente día, ahí estaba Bruno, tenía el ojo morado. Bruno le pidió disculpas por haberle dicho al soldado que él se lo había robado. Y Scout le dijo que le perdonaba.

Scout le dijo a Bruno que su padre había desaparecido, él le dijo que como le gustaba tanto explorar, que le ayudaría a encontrarlo, que prepara un pijama de rayas igual que el suyo y él se cambiaría, que llevaría una herramienta para cavar y poder entrar. Se escuchó la sirena y Scout salió corriendo y le dijo que mañana tendría el pijama. Por la noche cenaron, pero cuando se fueron a dormir los padres pelearon, y Bruno, asustado, se fue a la cama de su hermana para poder dormir porque tenía mucho miedo cuando los padres se peleaban. Después de dormirse y los padres dejar de pelear, paso el día.

Por la mañana, Bruno se despertó y la madre estaba preparando las maletas, recogiendo las cosas porque se iban a mudar por una temporada de allí. Cuando la madre estaba metiendo las maletas en el coche, preguntó por el soldado y la sirvienta dijo que, como el padre era del partido contrario, lo tenían que quitar de soldado.

Bruno preparó un bocadillo para Scout y se lo escondió debajo de la camiseta. Cuando iba a salir de su casa, la madre le dijo que no tardara, que ya mismo se iban. Él le dijo que sí y echó a correr, salto la ventana y salió corriendo. Cuando llegó Bruno, le dijo a Scout que si había traído el pijama y le dijo que sí. Scout le preguntó a Bruno si se había traído el bocadillo, él le dijo que sí pero se le había caído al saltar la ventana. Se cambio y se puso a excavar el túnel. Aquí sigue la historia, pero no cuento más para que podáis descubrirlo vosotros mismos.

 

 

El niño con el pijama de rayas

 

Autor: Gonzalo Soto Palma
Curso: 2º ESO-C
IES San Fulgencio. Écija (Sevilla)

 

El día que mi madre me compró el libro, la alegría se apoderó de mí; llevaba mucho tiempo   esperando ese agraciado libro. Cuando por fin lo tenía en mis manos, empecé a leerlo. Fue un libro que marcó mi vida para siempre.

Trataba de la época de Hitler, cuando los nazis arremetían contra los pobres judíos. Yo no podía entender cómo tan solo un hombre con un raro peinado y un corto bigote pudo dominar casi todo el mundo, cómo la gente podía entender que los judíos eran malas personas, un mundo cruel para aquellos judíos…

Cuenta que una familia nazi muy poderosa se muda a una gran casa en el colorido campo. Los hijos no estaban muy de acuerdo. El hijo era bastante curioso y fue a dar una vuelta por el campo sin saberlo sus padres. Al cabo del rato, se encontró como una especie de campo de concentración. Se acercó al otro lado de la valla y contempló a un niño solo dentro de ella. Se hizo su amigo y desde entonces todos los días lo visitaba.

Un día, el curioso niño de la valla le dio una idea: conseguirle un traje parecido a un pijama que todas las personas de dentro de la valla llevaban. Así, él podría jugar y ver lo que había dentro.

Al día siguiente, como había dicho, él consiguió un pijama, cavó en el suelo, y se adentró sin   mirar atrás. A partir de ahí, empieza lo más importante de la historia.

Recomiendo que lean este libro. A mí, personalmente, me ha hecho cambiar mi forma de vida y replantearme ser mejor persona con los desgraciados.

 

 

Los juegos del hambre

 

Autora: Laura Moral Díaz
Curso: 2º ESO-C
IES San Fulgencio, Écija (Sevilla)

 

En realidad, no es un libro, es una trilogía fascinante, hasta el punto de adictiva, de lo que os voy a hablar, pero me voy a centrar en el primer libro para no desvelar y poder mantener la emoción hasta el final.

Su autora es Suzanne Collins. Ha recibido innumerables críticas positivas, así como multitud de elogios. Collins también es autora de otra saga de fantasía. Los dos primeros libros (Los Juegos del Hambre y En Llamas) ya han sido adaptados a la gran pantalla arrasando las taquillas y con las salas de cine abarrotadas.

Aún me estoy leyendo el tercer libro, Sinsajo, y es mi deber recomendaros esta fantástica trilogía. Yo oí hablar de ella el año pasado cuando una antigua compañera mía me los recomendó, pero yo no me preocupé de buscar el libro. Creía que sería muy largo de leer por el grosor, pero estos libros me han hecho aprender que no importa las páginas que posea, ni cómo sea la portada porque lo que de verdad importa es lo que el escritor ha intentado transmitirnos. Cada tarde, cuando salía del instituto, deseaba llegar a mi casa para sumergirme en el mundo de Panem.

Es una historia que nos traslada a una oscura versión del futuro donde doce chicos y doce chicas se ven obligados a matar para mantener sus propias vidas. Nuestra protagonista, Katniss Everdeen, se presenta voluntaria a esta especie de juegos para ocupar el lugar de su hermana Prim, dejando atrás a su madre y a su mejor amigo Gale. Una vez que llegue a la arena, descubrirá que su compañero de equipo la ha estado amando en secreto. Este chico, Peeta, salvó la vida de la pequeña Katniss arriesgándose a la paliza que eso le iba a suponer. Ahora Katniss tendrá que elegir a quién le entregará su corazón, si a su mejor amigo o al chico de la sonrisa dulce interminable.

Creo que este libro es el mejor que he leído hasta ahora. Me ha hecho pensar en el futuro, si de verdad acabaremos así; no digo tan radical, sino acabando con la especie humana debido a las disputas que pueden ocurrir. Os recomiendo esta trilogía, os encantará.

 

 

Jon y la máquina del miedo

 

Autora: Mª Luz Fernández Ariza
Curso: 2º ESO-C
IES San Fulgencio. Écija (Sevilla)

 

Este es mi libro favorito. Lo compré en el colegio porque nuestra maestra nos obligó a comprarlo para la asignatura de Lengua. El libro trata de un niño que tenía mucho miedo a todo y un día, con su amigo, fue a la feria del pueblo y entró en una habitación sin darse cuenta y una voz empezó a hablarle de una máquina que le quitaría el miedo poco a poco. Entonces, la compró.

También el amigo de Jon es muy cobarde, pero supera el miedo cuando él va a casa del otro amigo y su padre cuenta que eso no es verdad, que todo es inventado y que nada más sirve para asustar a los niños. Pero el amigo de Jon se lo cuenta a Jon, aunque él sigue sin creérselo.

A mí me encanta este libro porque yo soy muy miedosa y me enseñó que poco a poco se puede ir perdiendo este temor y que no hace falta ninguna máquina como dice en el libro.

Ahora le doy gracias a mi maestra por obligarnos a comprar este libro.

Os lo recomiendo porque es muy divertido y muy educativo. En la portada dice que es para mayores de 10 años pero yo pienso que, si niños más pequeños lo leen, lo comprenden perfectamente.

En definitiva, un libro que para mí fue muy especial y creo que puede serlo para muchos jóvenes más.