A dos metros de ti
Autora: Lorena Berenguer Fernández
Curso: 2º ESO A
Centro: IES Profesor Tomás Hormigo, Cancelada (Málaga)
Uno de los libros que me he leído hace poco y que me ha gustado tanto, y que es uno de mis favoritos, ha sido A dos metros de ti. La historia se centra en una enfermedad, la fibrosis quística, que se diagnostica a temprana edad y que hay que sobrellevar. El libro narra también cómo no mucha gente concede importancia a los problemas de esas personas.
La gente que padece la enfermedad tiene un tiempo limitado de vida, aunque si le donasen unos pulmones podría vivir unos cinco años más con un tratamiento, por otro lado muy estricto, del que hay que estar pendiente cada hora de cada día.
El mejor amigo de la protagonista, Stella, también la sufre. Él llevaba el tratamiento y se podía decir que estaba bastante bien, pero un día cualquiera, el chico murió de repente. Stella, que padece fibrosis quística, se ve obligada a vivir en un hospital. Le gusta llevar bajo control la mayoría de las cosas de su vida, entre ellas tomar medicinas, disponerlo todo, llevar una agenda donde organiza todos sus planes de vida y mantenerse alejada de cualquier persona para no poder contagiarse, mientras espera un transplante pulmonar.
Un día conoce a un chico, Will, que tiene la misma enfermedad que ella pero, a diferencia de ella, a él no le importa llevar ese tratamiento, solo espera cumplir sus dieciocho años de edad y salir de ese hospital, viajar y poder recorrer el mundo. Ambos comparten muchos momentos juntos, siempre a dos metros de distancia, ya que Stella podría contagiarse y no podrían trasplantarle unos pulmones.
Entonces se produce el gran error de la sociedad: no saber lo que uno tiene hasta que lo pierde, aquello de que la alegría que reconocemos puede marcharse. Da pena, muchísima pena, tener que escribir sobre este tipo de cosas porque un libro te ha dado un golpe de realidad: cómo sin motivos aparentes nos llenamos de complejos por los que quejarse a diario, o no creer que la vida son suspiros y, cuando menos te lo esperas, llega el último y te has pasado más de la mitad de ella sin apreciarlos; sin valorar nada a tu alrededor, sin apreciar que estás vivo y, solo por eso, merece la pena ser feliz y vivir.
El libro, por tanto, gira en torno a dos grandes ideas: el amor y la muerte. Con la lectura del libro me cuestiono acerca de los dos grandes motores de nuestra vida. Y es que ¿qué pasa cuando se abrazan el amor y la muerte? ¿se muere el amor? ¿o se enamora la muerte?
Viaje al centro de la tierra
Autora: Mateo Carro Peyper
Curso: 2º ESO A
Centro: IES Profesor Tomás Hormigo, Cancelada (Málaga)
He elegido este libro por que, cuando lo leí hace tres años aproximadamente, me fascinó la idea de viajar al centro del planeta. Simplemente me encantaba pensar que podría haber cualquier cosa ahí abajo, desde una bola enorme de fuego hasta dinosaurios; era como entrar a un mundo completamente nuevo. Es decir, este libro se escribió en 1864, años en los que no existía casi nada de lo que tenemos hoy: no había móviles y leer algo así era increíble y pensaban que era ficción, que nada de lo que sale ahí podría crearse algun día.
Las personas que lo leían se quedaban con la boca abierta, alucinados. Sin embargo, hoy en día, 156 años después, si alguien lo lee le parecerá normal y tan solo hace siglo y medio era asombroso.
Este libro me encantó porque tenía de todo; tenía romance, aventura, misterio…
Mi personaje favorito es Axel porque me siento identificado con él en algunos aspectos. Mi parte favorita es cuando están en una playa rodeados de decenas de cráneos y huesos de animales y de humanos. También había caparazones de gliptodontes, que eran mamíferos acorazados que vivieron el el Pleistoceno.
Esas son la razones de por qué este es mi libro favorito y es que los libros de Julio Verne se siguen recibiendo con los brazos abiertos hoy en día, por así decirlo.
Nadie nos oye
Autora: Nerea Andrades Ramírez
Curso: 2º ESO A
Centro: IES Profesor Tomás Hormigo, Cancelada (Málaga)
Siempre estará en mi memoria un libro, ese libro. El cual al verlo por primera vez me parecía un cúmulo de láminas de papel con letras impresas encima, un libro que me obligaban a leer. Nadie nos oye, su título es ese. Un libro que por fuera me parecía el aburrimiento objetivado con forma rectangular pero, por dentro, era un mundo del que en la tierra no se hablaba, un libro que trataba de lo que, desgraciadamente, a muchas personas les pasa, pero es considerado un tabú.
Algunos de mis compañeros decían que era surrealista, que cómo unos menores de edad iban a beber a todas horas, y cómo iban a montar peleas en medio de la calle, o cómo iban a reunirse para abusar y acosar a una chica que era su amiga… Eso es lo más real que tenía el libro. Son cosas que se cuentan en los telediarios, se escuchan en la calle, pero nadie les presta atención.
No es un libro para todas las edades, yo lo recomiendo al menos, a partir de doce años, la edad con la que yo lo leí, y hasta la edad adulta y anciana, porque como he dicho, contiene la realidad y la realidad es, a menudo, dura. Habla de todo ello con mucha normalidad, tanto de lo malo, como de lo bueno.
La historia es contada por Emma, una psicóloga, y Quique, un entrenador de un equipo de waterpolo. Empieza sorprendiéndonos con un escalofriante crimen, el de un adolescente encontrado sin vida en un parque a causa de una paliza, se desconoce quién fue y es ese gran misterio el que se irá resolviendo durante toda la novela, dejándome a mí como lectora atónita ante lo que va sucediendo, sin tregua para mi inquietud interior.
A medida que avanza, las injusticias son mayores y te encuentras ante lo más bajo de la sociedad, como el racismo o la violencia de género, expuestos sin tapujos. También se desvelan secretos que salen a la luz mediante las relaciones entre las personas, los rumores, que son muy importantes para crear una especie de puzzle que los diferentes narradores van presentando al lector y que lleva a descubrir quién cometió el asesinato y toda la realidad social que hay detrás.
Me encanta este libro porque hace que el corazón te lata más rápido y fuerte, pero, sobre todo, porque te hace preguntarte cosas, como: ¿cómo la sociedad ha llegado a tal punto? ¿por qué hacemos todo esto? y ¿cambiará todo eso algún día?
El niño del pijama de rayas
Autor: Samuel Flores Cortés
Curso: 2º ESO A
Centro: IES Profesor Tomás Hormigo, Cancelada (Málaga)
Cuando leí El niño del pijama de raya, de John Boyne, me dio mucho que pensar. Pensé: “Es fácil ser muy feliz viviendo en la ignorancia”. Sin proponérmelo, me puse en el lugar de Bruno pensando en la vida tan diferente de su amigo; sin saber por qué.
Este libro lo he leído varias veces y en todas ellas me sigue encantado cómo John Boyne hizo visibles los pensamientos de Bruno sobre los símbolos de los que él desconocía su significado. Sin embargo, él juzgaba solo lo que veía de manera visual.
A mí me gusta especialmente la historia de la Segunda Guerra Mundial, y este libro me hizo ver la historia desde otro punto de vista. Me ayudó a comprender las posibles diferentes vidas en tan poca distancia; ver la gran diferencia de la vida de Bruno con la de su amigo cuando entra en el campo, tanto que no podía llegar ni a imaginar que alguien viviese en esas condiciones, y más aún alguien tan cercano y a la vez tan lejano como era su amigo Samuel.
La primera vez que leí este maravilloso libro no lo entendí, ya que era demasiado pequeño para alcanzar la tristeza que escondía. Dos años después quise releerlo, quería intentar de nuevo comprender la historia que me estaba contando, y lo hice. Lo leí y, según leía, mi opinión iba dando un cambio drástico. De ser en un principio un libro aburrido y sin sentido para mí, se convirtió en un gran aprendizaje y ayuda para poder observar y respetar otros puntos de vista diferentes a los míos.
Tras esa segunda lectura, le dije a mi madre que debía leerlo ella también, y logré convencerla. Pasados un par de días, acabó el libro e intercambiamos nuestra opinión respecto al libro y resultaron ser muy similares. La historia logró despertar en ella emociones que la llevaron a aficionarse también a los relatos de la Segunda Guerra Mundial.
Después de eso, también he visto la obra cinematográfica pero, no hay comparación con el libro, que ayuda más a la ahora de comprender la impresión de Bruno al entrar en el campo y plasma mucho mejor la idea del niño desde mi punto de vista.
El niño del pijama de rayas no lo puede leer cualquier persona ni comprender cualquiera pero, si eres capaz de ello, este libro será mágico para ti. Este libro me lo recomendó mi primo y él mismo fue quien me lo regaló y me ayudó a comprenderlo. Hoy en día lo guardo con mucho cariño, sabiendo que yo se lo daré a mi hijo cuando sea padre, pues me parece un libro muy recomendable, y para no olvidar la historia de ese trágico lugar, ya que me parece muy importante recordarlo para no caer en los errores del pasado.
Este libro recalca la idea del niño de querer que todo vuelva a la realidad, una realidad que él no puede percibir con detalles y no puede comprenderla debido a su corta edad. Él no puede entender el contraste de vida que podía haber entre estar dentro o fuera del campo, aunque él no sabía si habían hecho algún acto malo para merecer estar ahí dentro, por qué ellos estaban a ese lado de la valla. Eso mismo me costó entender la primera vez que lo leí ya que no conocía la historia. Lo único que quería el niño era la felicidad y estando ahí dentro era imposible encontrar la felicidad.