Invisible
Nombre: Adriana Grabiela Postolachi
Curso: 2º ESO B
Centro: IES Alcrebite (Baza, Granada)
¿Quién no ha deseado alguna vez ser invisible?
¿Quién no ha deseado alguna vez dejar de serlo?
Desde pequeña me gustó leer, pero hubo un tiempo en el que lo dejé, hasta que en las vacaciones de invierno me regalaron un libro. No me llamó mucha atención su portada, pero empecé a leerlo. Desde el primer momento me enganchó y no lo dejé hasta terminarlo. Se llama Invisible y está escrito por Eloy Moreno, un autor español. Es un libro fantástico que me encantó. Trata sobre el acoso escolar, que por desgracia todavía sigue pasando y parece que no va a acabar nunca. Debería de ser lectura obligatoria en los institutos porque hace reflexionar a todos y también te hace querer ser mejor persona.
Al principio no me enteraba de nada, estaba muy confusa, comenzaba directamente con el personaje principal hospitalizado sin recordar cómo es que llegó hasta allí, pero cuando el narrador empezó a contar la historia desde el principio, todo comenzó a cobrar sentido. El niño, lo único que recordaba eran los poderes que había obtenido antes. Entre ellos estaban el de respirar bajo el agua y el de la velocidad, pero había uno en concreto que era el más importante de todos: el poder de hacerse invisible. Lo deseaba hasta tal punto que en algunos momentos creía que lo era y que cuando lo deseaba con todas sus fuerzas, el resto del mundo no podía verlo. Aunque su hermana pequeña, Luna, era la única capaz de hacerlo. El chico sacaba buenas notas, le encantaban los cómics de superhéroes y adoraba a su hermana pequeña.
Todo esto comenzó al no darle las respuestas en un examen al líder y abusón de la clase, al cual llamaban MM: el chico de los nueve dedos. Había repetido dos veces de curso, tenía una familia adinerada y le permitían y compraban lo que fuese. Esto habría podido ser totalmente distinto si aquel día todo hubiese sido diferente, un pequeño detalle que puede cambiar una vida entera. Es algo triste el hecho de que el niño pensaba que de verdad no lo veían por su poder, pero en realidad era porque el resto de la gente no quería involucrarse en esto. Los únicos amigos que tenía, Kiri: la chica de las cien pulseras y Zaro: el chico de la cicatriz en la ceja no hacían nada por él, por miedo a que les ocurriese lo mismo. Sus padres simplemente seguían con la rutina diaria sin darse cuenta de lo mal que lo pasaba, los profesores preferían ver, oír y callar y los compañeros de clase compartían los vídeos y las burlas, porque para ellos era mejor reír que ayudar. La única persona que se dio cuenta de la situación y no le dio la espalda era la profesora de literatura, con un dragón tatuado en la espalda, porque también había sufrido acoso escolar y sabía lo que se sentía. Entendía su miedo y dolor como nadie, porque para ella, él no era invisible. En el libro menciona que el dragón hablaba, pero esto era una forma metafórica de referirse a sus pensamientos o de la furia que tenía guardada.
Al final, el chico no pudo soportarlo más y decide acabar con su vida, por suerte la profesora lo siguió y lo rescató. A partir de ese momento, todos pudieron verlo porque ya no era invisible. Cuando lo terminé, empecé a interesarme más por la lectura y ahora no paso un día sin leer algún libro.
Por trece razones
Nombre: Irene Fernández Rubio
Curso: 2º ESO A
Centro: IES Alcrebite (Baza, Granada)
Esta novela es una fascinante y devastadora historia de una situación real entre jóvenes. Además, es una historia que me fascinó por cómo te muestra la realidad sin ningún tipo de tabú y dándole una sensación de suspense. La historia de este libro, también te enseña lo afortunado que eres por tener tantas personas que te quieren a tu lado y que saben entenderte y ayudarte, no como la vida de la protagonista.
Una caja, trece caras de casete, trece culpables y una víctima.
Apenas han pasado dos semanas desde el suicidio de Hannah, cuando su supuesto amigo Clay encuentra una misteriosa caja en la puerta de su casa al volver de clase. La caja, contiene unos casetes que serán el comienzo de un perverso juego que involucrará a todos los responsables de la muerte de Hannah.
Antes de que pasase ese trágico suceso, Hannah, una chica que estaba en su peor momento, decidió grabar las razones por las cuáles ella se estaba destruyendo.
Más tarde, todos los responsables escucharon las cintas en las que ella nombraba las horribles cosas por las que había pasado gracias a ellos.
Por trece razones, un libro muy inquietante. Te recomiendo leer esta bella historia.
La llamada de lo salvaje
Nombre: Julia Sánchez Baena
Curso: 2º ESO A
Centro: IES Alcrebite (Baza, Granada)
“¡Hola! Soy Buck. Soy una mezcla de San Bernardo y Scotch Collie. Soy el perro del juez Miller, bueno, antes lo era. Yo era un perro enorme y mimado, al menos antes de que el jardinero de mi amo me secuestrase y me metiese en una caja. Me alejaron de mi casa y de mis comodidades. Ya no me mimaban ni me daban de comer cuando quería. Así que aprendí que la vida no era solo la que yo tenía en mi casa, sino que había otras cosas. Cuando llegué a Seattle me enseñaron la regla del garrote y el colmillo, una que yo no conocía, pero que sí me hizo falta en muchas ocasiones más adelante. Esta regla consistía en aprender que el humano que tenía el garrote, era superior a ti, y que no podías hacer nada para evitarlo.
Después de eso, me vendieron a unos canadienses, con los que iban otros perros de trineo. Los canadienses me entrenaron como perro de trineo y con ellos aprendí a sobrevivir junto con mis otros compañeros. Poco a poco mi lado salvaje se iba intensificando.
Luego me vendieron juntoa mi equipo a “El Mestizo”, que cargaba cosas pesadas hasta Skaguay, y que nos volvió a vender cuando ya estábamos en pésimas condiciones para seguir tirando del trineo.
Los nuevos dueños eran realmente novatos y no durarían mucho en esas tierras inhóspitas. Justo antes de cruzar un río medio helado llegó John Thornton, el hombre que me salvó la vida, impidiéndole a mis dueños de aquel momento cruzar ese río. Sin embargo, ellos cruzaron sin mí y se congelaron en aquel río.
Justo después de eso, me encariñé de John. Este hombre, aparte de salvarme la vida me cuidó hasta mi total restablecimiento. A partir de ahí, le fui leal. Nunca había sentido algo así por un humano. En muchas ocasiones, arriesgué mi vida para salvar la suya, pero para mí eso no importaba, él era el mejor humano que había conocido nunca. Incluso llegué a ganar mil seiscientos dólares para John. Gracias a eso, John Thornton, sus compañeros Pete, Hans y yo nos fuimos en busca de oro a las tierras del este donde no encontramos nada. Así que nos establecimos en un campamento. Cada día, yo era más salvaje, incluso llegué a devorar un alce durante seis días. Pero cuando volví al campamento, John, Pete y Hans habían sido asesinados por indígenas. Yo estaba devastado. Vengué a John asesinando a los indígenas pero ya sin ninguna conexión con los humanos decidí unirme a la manada de lobos grises. Todos los años, el día que John Thornton fue asesinado visito el campamento. Ahora soy un miembro de la manada, pero nunca olvidaré a John.”
Este libro es uno de mis favoritos, porque me encantan los animales y además me recuerda que todos tienen su lado salvaje, por mucho que estén domesticados. Eso forma parte de ellos, aunque puedan querer mucho a un humano.
Yo recomiendo este libro a todas las personas que sienten amor por los animales, aunque sea sólo un poquito.
El niño con el pijama de rayas
Nombre: Julio Roda Sánchez
Curso: 2º ESO A
Centro: IES Alcrebite (Baza, Granada)
Este libro fue escrito por John Boyne en el año 2006. Trata sobre el holocausto alemán que era una palabra desconocida para mí hasta que descubrí este libro, que un principio pensé que sería muy aburrido. Hasta que comencé a leerlo y poco a poco empecé a meterme en el papel de Bruno, el protagonista de esta historia, un niño alemán de 9 años que su vida cambia al mudarse de Berlín a Auschwitz junto a su familia debido al trabajo de su padre en un campo de concentración.
En un principio no está muy contento, pero poco a poco se acaba acostumbrando a su nueva vida. Bruno siempre veía por su ventana muchas personas con un pijama de rayas al otro lado de la alambrada, pero él no entendía lo que estaba pasando. Un día decidió ir a explorar por la zona hasta que llegó a la alambrada y al otro lado encontró a un niño llamado Shmuel con el que poco a poco empezó a crear un gran vinculo hasta el punto en el que se veían todos los días y charlaban durante toda la tarde. Bruno siempre se preguntaba por qué su amigo Shmuel estaba tan delgado y sucio, pero nunca encontró ninguna explicación a pesar de haberle preguntado. Tras un año en Auschwitz su madre decide que no es un buen sitio para criar a Bruno y a su hermana Gretel. Así que decide volver a Berlín con ellos dejando en Auschwitz al padre trabajando. Esto a Bruno no le hacía mucha gracia, ya que se había acostumbrado a su nueva vida y sabía que no volvería a ver a Shmuel. Así que arma un plan para poder colarse en el campo de concentración y poder despedirse se Shmuel antes de irse a Berlín.
Yo lo que nunca esperaba era el final de esta historia cuando bruno muere junto a Shmuel en una cámara de gas en aquel campo de concentración.
A pesar de que es una historia muy triste me ha encantado leer este libro y me ha hecho meterme en la piel de ambos personajes, también me ha enseñado el valor de la amistad y además me ha ayudado a aprender mucho de algo que yo no tenía ningún conocimiento: la Segunda Guerra Mundial. Así que si no sabes qué libro leerte yo recomiendo este.
Reina roja
Nombre: Leonor Mora Montoro
Curso: 2º ESO B
Centro: IES Alcrebite (Baza, Granada)
“Soy un tanto especial. Realmente, lo especial es mi cerebro. Procesa demasiada información, y en muy poco tiempo, haciendo que mi cabeza se convierta en una jungla, una jungla llena de monos que van de un lado a otro moviéndolo todo y alterando mis pensamientos. Sí, así es Antonia Scott. Así soy yo.
Hoy, algo está pasando en las escaleras de mi edificio de Lavapiés, ocho plantas más abajo. No pueden ser los vecinos, reconocería sus pasos, reconocería las pisadas de cada uno de ellos. Tampoco es un cartero, o alguien vendiendo propaganda, no, hoy no, es domingo. Me da un vuelco el estómago al escuchar esas pisadas a metros de mi puerta. Alguien está a punto de interrumpir mis tres minutos, esos tres minutos diarios que necesito para seguir cuerda. Tres minutos donde mi cabeza es capaz de calcular cuánto tardaría mi cuerpo en caer por la ventana que tengo justo enfrente si me tirase por ella, o cuántos miligramos de morfina necesito ingerir para morir en un breve periodo de tiempo, y casi sin dolor. Mis tres minutos, que van a ser interrumpidos. Ha vuelto a intentar sacarme de aquí, otra vez más.
Llaman al timbre. No abro. Vuelven a llamar insistentemente otras tres veces más. Sigo sin abrir. Al séptimo aporreo de puerta y duodécimo sonido del timbre, abro. Es Jon Gutiérrez.
Realmente, no lo conozco de nada, pero sé por lo que ha venido. Mentor quiere conseguir como sea que salga de aquí. Después de salvar decenas de vidas, todo parece perfecto; pero cuando por culpa de tu trabajo, y salvar todas esas vidas, tu marido probablemente no despierte del coma, todo deja de ser perfecto para convertirse en una auténtica pesadilla. Es lo que tiene ser la Reina Roja, y trabajar en un proyecto ultra secreto resolviendo crímenes, que por supuesto, ya me dan igual. Debí pensarlo antes, ya no puedo solucionar nada. Ya cargo internamente con toda la culpa.
Jon Gutiérrez, inspector de policía, acusado de corrupción y suspendido de empleo y sueldo; demasiado desesperado debe de estar para que Mentor le haya convencido de venir a buscarme.
Pero me puede, él tiene algo. En cuanto le veo al abrir la puerta sé que va a pasar en la próxima media hora. Y tengo la total certeza de que mis predicciones se van a cumplir. Nunca fallo. Aunque no se lo voy a poner fácil. El encargo de Mentor es siempre el mismo. “Saca a esa mujer de su apartamento y consigue que se monte en el coche. Si lo haces, tendrás una muy buena recompensa. Pero te advierto que no va a ser algo fácil. Suerte”.
Esta vez, están a punto de conseguirlo. Voy a subirme en ese coche, aunque sufriendo internamente sin saber qué es lo correcto. Los monos vuelven a aparecer, a saltar, a chillar, a mover cosas. Le prometí a mi marido que nunca más pasaría, que no lo volvería a hacer. Pero voy a romper mi promesa. Bastante arrepentida, pero voy a volver a trabajar. Necesito resolver ese caso.”
La vuelta al mundo en 80 días
Nombre: María García Lozano
Curso: 2º ESO A
Centro: IES Alcrebite (Baza, Granada)
“Yo soy Mister Fogg y conseguí dar la vuelta al mundo en tan solo 80 días. Todo comenzó por una apuesta en el salón del Club Reform, mientras jugaba al whist con mis compañeros. Discutíamos sobre un individuo que arriesgadamente había robado cincuenta y cinco mil libras del Banco de Inglaterra y la policía inglesa lo perseguía enviando inspectores a los principales puertos del mundo. Mientras cuestionábamos que dar la vuelta al mundo en 80 días era prácticamente imposible, yo me apresuré a aceptar la apuesta con casi veinte mil libras en juego, algo que no resultó muy difícil, pues tenía controlados todas las horas de entrada y salida de los transportes en los que mi nuevo criado y yo tendríamos que viajar si queríamos llegar a la hora prevista para cumplir la apuesta.
Sin embargo, ese no fue el problema que nos acechó durante el camino. Fix, aliado de la policía inglesa, viajaba en el mismo barco de nuestra partida buscando al autor del robo. Nuestra extraña apariencia le hizo pensar que estaba cada vez más cerca del presunto ladrón del Banco de Inglaterra, ya solo le faltaba el momento exacto para confirmar mi culpabilidad. Aunque todavía quedaba demasiado recorrido para aprovechar algún error clave que asegurara mi detención. Fix, utilizaba cualquier ocasión de la que poder recabar los últimos datos que confirmaran sus sospechas.
Mientras tanto, el viaje iba como había planeado, de Londres a Suez, de Suez a Bombay, de Bombay a Calcuta y así pasando por un sinfín de lugares hasta de Nueva York volver a Londres. Pero empezaron los incidentes, los retrasos del tren en el que nos dirigíamos, puentes rotos, una cruzada de búfalos sobre las vías del tren y un rescate, todo esto retrasaba la llegada a tiempo de un largo viaje. En este último, viajábamos en elefante y arriesgamos nuestra vida para salvar a una joven de ser quemada por un sacrificio humano, en una tribu de indígenas. Después de todo era muy difícil poder llegar a tiempo, pero no me rendí. Cogimos el barco con destino a Liverpool (Londres) y a nuestra llegada, para nuestra sorpresa, Fix estaba allí. Él me detuvo, ya no tenía esperanzas, el tiempo iba a contrarreloj y temía por el dinero perdido. Poco después, las puertas del presidio se abrieron y escuché una voz que decía que estaba en libertad por una confusión. Aun así, confiaba en llegar a tiempo a Londres y así fue. Mi criado Passepartout, la joven rescatada y yo habíamos conseguido la apuesta casi imposible.”
Mi opinión sobre este libro es muy satisfactoria, ya que me transmite y me hace sentir el papel del personaje principal del libro. Parece que estás dentro de él y que estás viviendo realmente esa aventura. Me despierta las ganas de viajar, de arriesgar, de no perder nunca la esperanza, de conocer mundo y sobretodo las ganas de seguir leyendo.
La ciudad de las bestias
Nombre: María José Resina
Curso: 2º ESO A
Centro: IES Alcrebite (Baza, Granada)
Hola hoy vengo a contar mi historia. Antes de todo me presento soy Alexander Cold el protagonista del libro La Ciudad De Las Bestias cuya autora es Isabel Allende.
Todo empezó cuando mi madre enfermó de cáncer y mi padre me llevó a New York con mi abuela (Kate Cold), que resulta que es reportera en el National Geographic y tuvo que irse de expedición al Amazonas y me llevó con ella. Cuando me lo dijo me emocioné, pero luego cuando llegó la hora de la verdad me dio un poco de miedo. Cuando llegamos al Amazonas conocimos a un antropólogo que fue nuestro guía durante la expedición también conocimos a su hija (Nadia) que tenía mi edad. Lo que yo en ese momento no sabía era que lo amigos que íbamos a ser Nadia y yo y las aventuras que íbamos a vivir juntos.
Nadia sabía varios idiomas de tribus indígenas de por allí, también sabía hacer sonidos de animales. Una noche ella llamó a un hechicero amigo suyo llamado Walimai y este nos dijo que la expedición era peligrosa y que en el camino iba a morir gente del equipo, pero que nosotros íbamos a llegar a la ciudad de las bestias porque según el éramos almas limpias y habíamos sido llamados para llegar hasta allí. En ese momento yo no sabía que decir, la verdad no me creí lo que dijo Walimai. En esta larga aventura aprendí que mi animal totémico es el Jaguar y el de Nadia es el águila. Lo que Nadia y yo nunca nos imaginaríamos eran los planes malvados que Carias tenía. Los indios nos raptaron y nos llevaron con ellos, descubrimos El Ojo Del Mundo y La Ciudad Del Dorado. Allí me dieron El Agua De La Vida que me ayudaría a curar a mi madre del cáncer. Nos encontramos con Las Bestias (una tribu indígena) que nos hablaron sobre el Rahakanavira una criatura que va sembrando el terror por donde va.
Cuando regresamos a la expedición Nadia y yo ayudamos a los indios a comunicarse con la gente de la expedición y logramos convencerlos de que se vacunaran contra el sarampión y la varicela, ya que estaba siendo letal entre ellos, pero lo que nosotros no sabíamos era que eso solo era otro de los malvados planes de Carias y la doctora Torres, que inyectaban virus letales en las jeringas de las vacunas. Carias vio el momento perfecto para robar las riquezas de El Dorado, en cuanto nos enteramos los detuvimos y conseguimos que todo volviera a la normalidad. Aprendimos que La Bestia no existía y que el Rahakanavira era el propio Carias. En el final de la aventura me tuve que despedir de Nadia con mucha tristeza, pero a día de hoy seguimos en contacto y iré a verla pronto. Por lo que he escuchado a la mayoría de vosotros los lectores os ha gustado mucho nuestra historia, espero que os haya servido para reflexionar y aprender que hay que respetar las riquezas del planeta.
Y con esto me despido.
Se busca Au Pair
Nombre: Paola Morales Castaño
Curso: 2º ESO B
Centro: IES Alcrebite (Baza, Granada)
Desde que aprendí a leer, no solo he vivido mi vida, también muchas más. Me he convertido en una heroína, he vivido en un internado, he hecho de detective, he resuelto asesinatos y lo que más me ha gustado, me he convertido en “Au Pair”, pero de esto hablaremos más tarde.
Todas esas diferentes vidas las tengo almacenadas en un par de estanterías en mi habitación, cada una de ellas ocupa un pequeño espacio, a primera vista, insignificante, pero en realidad es mucho más que un objeto con forma rectangular de portada llamativa y que recibe el nombre de libro. Las vidas son un conjunto de páginas llenas de letras en las que se deslizan las aventuras que hacen que me transporte a un mundo imaginario donde todo puede ser posible.
Para mí, un buen libro es ese que no puedes parar de leer, que cuando cae la noche, entras en un combate con tus ojos para no quedarte dormida mientras que pasas las hojas. Te metes dentro de la historia y pierdes la visión de las letras porque te ha transportado completamente. Se Busca Au Pair cumple todos estos requisitos. Este es un libro que he leído recientemente y que me ha salvado de un bloqueo lector, para quién no sepa qué es esto, básicamente es un periodo en el que el lector se siente angustiado porque quiere leer más de lo que puede, pero no es capaz de acabarse un solo libro.
Se busca Au Pair está escrito por Carlos Mayo un autor español nacido en 1990 en Alcoy (Alicante), es licenciado en Periodismo y Filología y escribe desde los quince años.
“Me llamo Alba Trebejo y os voy a contar mi historia, una historia que cambió mi vida. Oscuridad, eso es lo único que recordaba cuando me desperté, había sufrido una crisis de ceguera transitoria, en la que una mancha negra fue invadiendo poco a poco mi campo de visión en el examen de selectividad, mi sueño de estudiar medicina en la universidad se iba por la borda. Ahora estaba desganada, sin fuerzas… Pero una nueva oportunidad llegó a mí, podría trabajar como Au Pair. A cambio de vivir en la casa de una familia en el extranjero, recibir un pequeño sueldo y aprender o mejorar el idioma, sería la encargada de cuidar a los niños y ocuparme de tareas menores, como hacer sus camas, entrenarlos, jugar con ellos, lavarlos y vestirlos.
Mi destino final fue la mansión de Gloomy Gardens, en Grey Hills (Inglaterra), conocí a los miembros del servicio, a Filly, Bishop y Rooki, los encantadores niños a los que cuidaría y a Victoria Crowned la madre y dueña de la casa.
Con el paso de los días, descubrí que la mansión ocultaba millones de secretos inquietantes que no me dejarían dormir, pero gracias a Dios que no estaba sola, Jake el camarero de “The Joker” una cafetería del centro del pueblo me ayudaría a desvelarlos uno por uno.
Para empezar, la casa me estaba mandando mensajes para que huyera de ahí. ¿Qué significado tenían los siniestros cuentos que escribía la pequeña Filly? ¿eran reales o solo creaciones de su imaginación? ¿Qué sucedió con el señor Cronwed? ¿estaba muerto o quizás había huido con la anterior “Au Pair”? según el pequeño de los hermanos, Rooki, su padre estaba dentro del pozo del jardín, el cuál ocultaba otro enigma para resolver: ¿qué significado tenía el dibujo grabado en él? Otro misterio era el de John, el bebé, aunque nunca lo había visto en la casa, le servía el desayuno a través del montaplatos, pero no podía revelar lo que había bajo la campana ¿qué ocultaba Victoria Crowned acerca de este caso? ¿Y que pasaba con el desván? ¿qué misterio había encerrado en él? Además, algo aterrador estaba relacionado con los sirvientes, pero… ¿qué sería? La casa tenía sus normas, vida propia y cumplía los deseos de quienes la habitaban ¿podrían ser estas suposiciones ciertas? ¡Era un completo enigma! Y lo último, pero no menos importante: Jake, mi aliado, mi fiel compañero, la única persona a la que podía contarle todo ¿era realmente alguien de fiar?
Todas estas dudas deambulaban en mí cabeza esperando una respuesta, solo tenía una cosa clara: me estaba enfrentando al caos y todo era posible.”
He elegido Se busca Au Pair porque me ha provocado una mezcla de sentimientos al leerlo que me hacen empatizar con Alba, su protagonista. En cualquier momento la historia podía pegar un giro inesperado, ni un segundo sientes aburrimiento mientras lees sus páginas que aguardan un constante combate entre la realidad y la ficción. Al final descubres que no todo es lo que parece y que los secretos, los enigmas y los misterios están presentes durante toda la trama, y tú, ¿tienes algo que ocultar? ¿te atreves a leerlo?