Tierra de mujeres
Nombre: Ana María Begines Rubio
Curso: 2º ESO B
Centro: IES La Janda (Vejer de la Frontera, Cádiz)
Al menos alguna vez en nuestra vida habremos leÍdo ya sea un libro, un cómic o alguna novela. Pero seguro que muy pocos se han parado a pensar, lo duro que es poder tener un libro en nuestras manos; ya que un libro, no es solo una hoja de papel, sino que es un método de comunicación entre el escritor y el lector. En esa simple hoja de papel el escritor puede escribir sus sentimientos, sus ideas e incluso sus preocupaciones.
María Sánchez es una de las pocas escritoras andaluzas que apenas le importa su remuneración económica, ella se ha dedicado siempre a hacer entender a las personas a través de sus libros y sus poemas que el mundo no es solo nuestro (los seres humanos), sino que en él también viven otros seres como pueden ser animales o plantas.
Tierra de mujeres es un libro que te hace reflexionar, trata sobre cómo hemos llevado la vida de un extremo a otro totalmente diferente. Todo empieza en como ha ido evolucionando el ser humano, y cómo ha ido volviéndose mas egoísta aún de lo que era antes. Ella nos cuenta a lo largo de toda la historia cómo los hombres están por encima de las mujeres aún en el siglo XXI, que cómo algunas mujeres se dejan guíar por el comportamiento de algún otro hombre simplemente para sentirse superior al él.
Después tambien nos cuenta de cómo nos estamos cargando el medio en el que vivimos, siempre con tanta basura, tanta falta de conciencia, tan poca madurez. Nos explica cuál es la diferencia entre el mundo de hace treinta años y el mundo de ahora. Antes no existía el cautiverio tal y como lo conocemos ahora, antes una persona iba a cazar y a lo mejor traía un conejo para que su familia pudiera cenar ese día, pero no es como ahora que cazamos por diversión, sin necesidad alguna.
Y esto son solo ejemplos de lo que nos cuenta el libro, pero en cada capítulo que te lees, te lleva a un mundo totalmente diferente.
A mí este libro me ha hecho abrir los ojos hacía el futuro que nos espera, me ha llenado de esperanzas, pero no todo ha sido perfecto, ya que la autora a la hora de escribir ha cambiado muchas veces de opinión y a lo mejor algunas veces prefería el blanco y otras veces el negro, pero aún así es un libro muy educativo y lo recomiendo leer a aquellas personas que les interese el medio ambiente y le interese saber un poco más sobre nuestro mundo.
Matar un ruiseñor
Nombre: Nophar Kamin Kvint
Curso: 1º ESO D
Centro: IES La Janda (Vejer de la Frontera, Cádiz)
Leí mi primera palabra a la edad de dos años y medio, creo que ese fue el momento en el que me sumergí en el mundo de la lectura. No puedo decir que estoy loca por los libros, porque conozco a gente que está en medio de quince libros y tienen una colección de libros esperándoles después de finalizar el siguiente. Pero reconozco que leo mucho y que cuando leo un libro bueno, puedo aguantarlo en la mano todo el día. Tengo dos hermanos mayores, así que cuando era pequeña, mi madre solía leernos libros, un capítulo por noche, y nosotros escuchábamos atentamente. No hay ningún tipo de libro que me guste especialmente, leo un poco de todo y varía mucho lo que me gusta. Los dos factores con los que sé si me gusta una novela o no, son la historia y, sobre todo, la manera en la que está escrita. Es increíble la manera en la que me sumerjo en un mundo que no es real, y que lo hago para ignorar todo lo demás.
Cuando por fin encuentro un libro bueno, puedo leerlo horas seguidas, quedarme despierta hasta la una de la madrugada leyendo y no me puedo concentrar en otra cosa. Suelo leer en inglés, siento que tengo un vocabulario más extenso en este idioma, pero también leo en español. A parte de ambos idiomas, sé leer en hebreo (bastante peor que en inglés o español) y creo que al ser trilingüe me abre más puertas en lo que es el mundo de la literatura.
No hay duda de que la lectura no es solo palabras inscritas en un papel, sino un mundo entero, con personajes, lugares, emociones que pueden afectar a cualquiera que lo lea. La lectura nos deja una marca en nuestros conocimientos, y por ello es una de las mejores cosas que le ha ocurrido al ser humano.
Respecto a mi libro favorito, diré que cada vez que me hacen la pregunta de cuál es mi libro preferido, automáticamente respondo Harry Potter, pero, al planteármelo, pienso que es una obsesión sobre todo. Por lo tanto, he decidido hacer la redacción sobre otro libro que me ha encantado, titulado, Matar un ruiseñor, el cual me leí muy recientemente. Esta novela de Harper Lee está situada en Maycomb, Alabama, en los años treinta, durante la Gran Depresión, y trata de los conflictos entre clases y razas humanas en aquella época y en aquel lugar. Me gustó especialmente el hecho de que explica lo que era una cultura diferente y que son tiempos y maneras de actuar totalmente desconocidas a nuestra generación y a nuestra actualidad en la mayor parte.
En el pequeño pueblo en el que vive la protagonista y su familia todas son personas conocidas, o de las que se han oído rumores, por lo que cuando fue acusado Tom Robinson, un hombre negro, de violar a una jóven blanca de 19 años fue mencionado por todo el pueblo. El personaje principal, la pequeña Scout Finch de la edad de 6 a 9 años, cuenta su vida, sus aventuras con su hermano, Jem, y nos informa del caso de Tom Robinson, el hombre al que defiende como buen abogado que es el padre dESOt, Atticus.
Me gusta que el juicio realmente no comienza hasta más de la mitad del libro, antes de eso, Scout nos cuenta desde sus ojos jóvenes, su vida y experiencias en aquel pueblo. También me gusta que contiene mucho diálogo, por lo que es difícil perderse en las palabras. Al leer este libro, me he imaginado a cada una de las muchas voces y a cada una de las muchas personas, algo que me parece muy importante en la lectura de una novela.
La conclusión que me ha transmitido la novela fue que cada hombre y mujer tiene derecho a ser defendido ante la ley, que cada persona es inocente hasta que se demuestre lo contrario y que blanco, negro, hombre, mujer y toda persona tiene derecho a vivir en libertad y a no tener que temer de las opiniones de los demás.
Vivir en paz y armonía con todos es imposible, siempre hay algún conflicto, pero el respeto no debe perderse por el hecho del color de tu piel, de tu sexo, de las distintas categorías que destaca incorrectamente la sociedad en la que vivíamos, vivimos, y, probablemente, viviremos. Así se dice en la novela: Nunca entiendes realmente a una persona hasta que consideras las cosas desde su punto de vista…” “¿Señor?” «… hasta que te metes en su piel y caminas con ella. Atticus Finch (Matar un Ruiseñor: Harper Lee).